viernes, octubre 10, 2008

LOS NIÑOS SE HACEN GRANDES



Abominable inferior, tú.


Todavía me acuerdo de un sábado de hace sus años ya ahí en el Tajo del Palo con los Corpas Bros. recién salidos del rocódromo y sin ni siquiera saberse hacer una reunión. Estaban en el Indio Gorrón y fuimos nusaltres, el Ton y yo menrrecuerdo, quienes les explicamos cómo se montaba una reunión, cómo se triangulaba y cómo no había que pelearse con el compañero de cordada, aunque fuera tu hermano. Después ya lo aprendieron y aprendieron que la resina era sólo la cosa del jugar cuando eres chico y el entrenar cuando eres grande y no puedes entrenar al aire libre con luz natural porque echas más horas que un tonto en los sitios del hacer algo de dinero y sólo te queda la luz artificial y las estructuras marcianas para lo de echar aunque sea un rato por la noche con los amigos y el movimiento, en amistad y sonrisa y con el super sexy swinging sounds bombeando su top ten del corazón pal cuerpo todo y pa la concurrensia.

No sé si mesplico, jiertamente. La cosa es que el tiempo pasa y si veinte años no es nada, que no sé yo, pues vete tú a saber en cuánto queda un lustro o poco más de conocencia cuando. Porque de aquellos dos niñacos (y uno de ellos ni niñaco entonces, que sería todavía calificable por entonces de mocoso así sin más) hemos pasado a dos tiarrones de los que da alegría haber conocido de chicos y ahora poder diszir que son amigos. El Carlitos ahí está dándole al cajón flamenco y retomando el apriete, que viene de hacer segundo sub20 en la reciente prueba de la copa najional celebrada en Sevilla, y estudiando el tío y todo palante palante después del hostión de a pique de matarse en el Chorro. Del Álex, que es el por qué de estar hablando de ambos, pues eso: Que ya nos cogió la ventaja güena hace un par de años ahí pegaíco a rueda del Pedro y de Rubén, enquistao'n las Alcandoras y paquín pallán por toda España, media Europa y cuarto y mitad de mundo y que ahí lo tenemos con los mocitos alpinistas del estado este español, uno del sur, el Álex, sí.

Pero la cosa por la que estoy aquí soltando el rollo es por lo de que, quién me lo iba a diszir a mí, que el niñaco este iba a, en na de años, compartir apertura, y en Gredos, con el Christian Ravier, grandmasterflash donde los haya. Ese suceso fantástico (este de Los prismaticos de Gavin, porque ha habido algún otro, la verdad) ha sido el bombazo del verano. Los que no saben quién es el señor Ravier, no entienden, claro. Pero, ofú, el Álex, nen.

Y yastá. Ahí llevas, Álex, guapetón, dos brazos grandes y un pellizco y reverencia. Y el croquis ahí se queda pa que la pípol toda pueda repetir y confirmar el "abominable inferior" de la propuesta. Cuídate y llévanos siempre por la entretela del adentro, tú. Aunque sea en el Japón y allí ni escales.

Cúchilo'l tío, en aphotico de hace un par de años en Galayos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ma acuerdo la primera vez que vi a la Luisa en el roco, barbas espesas, mirada profunda, caracter cortante... Me impresionó
Me dijó: " si vais a cahorros a vivaquear no se os ocurra dejar basura". Me quedé pensando:¿ quién será este tio? Más tarde supe quién era y después me dí cuenta de que aquela mala folla granaína era solo una coraza que escondía un gran corazón. Me alegro de haberme encontrado contigo aquél día. Merci por lo que me has enseñado pero también por lo que me queda por aprender de ti y contigo.

Un beso.

la luisa dijo...

mersis munchas, tigre. besico, l.